lunes, 24 de marzo de 2014

Quioscos

El primer concepto que encuentro acerca de vivienda es “bien inmueble o bien mueble”, esta decisión (o revelación) me ayuda a definir la casa, y poco a poco a encontrar nuevas salidas y entornos profesionales.
Tras leer sendas definiciones, encuentro que mi casa es un bien mueble: no está anclado, no tiene cimientos, posee sus propios medios para abastecerse, y cuando se sirve de la ciudad, no constituye un gasto extra.

Tras este primer paso me paro a pensar qué elementos se encuentran en mitad de la calle del mismo modo que intuyo que hace mi casa: los quioscos. Se trata de estructuras exentas de la calle, artefactos colocados allí como podrían estar en cualquier otro sitio. Sólo tiene unas necesidades mínimas de contexto. Leo una normativa sobre quioscos de España, los hay que venden flores, prensa, frutos secos, fruta de temporada, helados, etcétera. Y son un espacio público, y tienen que vender algo para estar donde están. Está claro. Parece que me estoy distanciando de mi cometido, cuando busco quiosco en inglés, ya que mi casa se encuentra en Londres. En Reino Unido tienen un concepto más amplio de los “kiosks”, son todo aquello que requiera una cierta estructura y se encuentre en mitad de la calle proporcionando un servicio público. Esto va desde los quioscos de helados de toda la vida, hasta las cabinas telefónicas o de policía, un aseo público, o una simple fuente. Pienso en convertir la parte exterior de mi casa en alguno de estos servicios, y ocultar mi casa en el interior, pero el efecto fake me aterra.

Indagando un poco más sobre los quioscos en Londres me topo con un concurso de “water dispensing kiosk”, una fuente. Lo organiza el Ayuntamiento de Londres para dotar a las calles desde Picadilly Circus hasta Oxford Street (mi calle) de fuentes icónicas que den carácter al paseo. Es interesante saber que se busca este efecto.

Por otro lado, en uno de los enlaces de Ester me encontré con un trabajo de DK-CM, Folk in a box, una instalación (en Londres) que consiste en una performance en la que desde dentro del quiosco sale música folk y entras para vivir la experiencia. Esto me abre un mundo nuevo de posibilidades pues, siendo parte de una exposición u obra artística, no hay reglas acerca de ubicación o duración, todo depende del compendio entre la galería y el Ayuntamiento. Además, permite que la casa tenga una utilidad durante todo el día, y no sólo cuando haya alguien dentro.

Así pues, se crearía una ambigüedad en el proyecto. Existe la parte interior y la exterior. Cuando hay alguien dentro, el límite es impenetrable, el espacio interior es el único vivido, y el exterior sirve para saber que está ahí, para recordar que la ciudad está a un paso, y como decoración de gente pasando. Y cuando no hay nadie, se queda abierta a cualquiera que pase, de par en par, desapareciendo el interior para pasar a ser la fachada. Intentaré dibujar esto correctamente para que se entienda de lo que hablo, pero básicamente la casa se convierte en una exposición itinerante, bien por la estructura en sí, por haber unos cojines muy cómodos en mitad de la ciudad, o como estantería de libros que mirar mientras esperas el autobús. La casa interactúa ahora con la ciudad y con su contexto. En el momento en que el interior vaya a ser usado por el inquilino, se informa a los usuarios temporales que la atracción va a cerrar, y la casa se cierra sobre sí misma, para conformar el espacio de intimidad para el que fue concebida. Sin embargo, esta última opción me supone ciertos problemas pues el hecho de tener que echar a gente para estar en la casa me perturba, quizás se podría crear algún tipo de señal sonora o similar, cuando el inquilino se acerca. No me convence tampoco.


Por tanto, me encuentro con dos posibles salidas en este punto del proyecto:

1. Que la casa se convierta en un objeto de mobiliario urbano y, respondiendo a la normativa acerca de quioscos, ofrezca algo al ciudadano, como un banco o una fuente, y que la casa esté oculta. (También podría buscarse el modo de que interviniera)

2. O bien que la casa sea, o forme parte de, una instalación artística itinerante por la cual queda abierta al público cuando no está en uso y se convierte todo el interior en una atracción. (También se podrían buscar variables)

No hay comentarios:

Publicar un comentario